Del corazón...

Me encuentro leyendo, aunque ya lo he revisado tantas veces, parte del siguiente mensaje : "...Algún día me gustaria ser yo la que te cantara :-), no canto así como tú, pero lo haría con el corazón...". Debo confesar que no sólo me gustaria que me cantara esa personita, eso es verdad, mas encuentro que cualquiera cosa que pueda hacer ella, me encantará, porque lo haría con su corazón.
Uno puede ser no ser un cantante consagrado, un pintor consumado, un bailarin a ojos cerrados, un actor de renombre...puedes ser o no ser tal o cual cosa, mas lo importante es que lo que hagas, venga desde dentro de ti. Uno nota cuando las cosas no se hacen de lo más profundo, porque no es esa sensibilidad artistica la que te vibra, sino que es el mismo organo de donde se originó la obra: el corazón. Y puede ser lo más simple del mundo, pero con una fuerza que te recorre completamente, porque sabes y sientes de donde viene. De hecho, tan sólo ese simple mensaje ya me hizo sentir fuertemente de donde venía, porque tenía (y tengo cada vez que leo, o vuelvo a ver algo de ella) una sensación muy profunda en mí. Esa es la fuerza de los detalles, de las expresiones que nacen en lo más hondo del ser humano, algo tan fuerte y tan incomprensible para la mayoría de la gente, excepto para quienes lo viven, lo sienten. Cuando es esa persona especial quien te dedica, quien te da esos detalles, es ella quien se entrega hasta en el más mínimo hecho, letra, sonido...y no es una sensación unilateral la que se vive, se siente en ambos corazones, en el que recibe y en el que entrega, quiensabe que mágica conexión exista, si no hay cables, ni wi fi ni cosa parecida. Y en conclusión, sabes porque: es sentimiento puro, es lo más grande que el ser humano puede dar y recibir, es amor, un puro, dulce, bello, tierno...y que entiende esa otra persona, que te mira, tal como le miras tú; le escuchas, tal como te escucha a ti; le sientes, tal como te siente a ti...
Y al final, lo principal es eso: que las cosas que se entreguen, sean del corazón. La otra persona lo sentirá, sabrá que es así, y tu lo puedes comprobar en el brillo de sus ojos, en la forma dulce de su boca formando una sonrisa, en ese suspiro callado que se desliza entre los labios, y sobre todo, en el latido que da el corazón que le recibe...es por ello que espero pronto a esa cantante, que me hace vibrar con la canción más hermosa que puede haber: la de su propio corazón.

Gracias mi niña...por entregarme la melodía de tu vida, y la letra de tu sentir...así como "Tú" sabes hacerlo, Amor...